Resumen: El trabajo desde casa ha aumentado la tasa de agotamiento entre los profesionales que trabajan. Ha difuminado la línea entre el trabajo y el hogar. Esto ha creado conflictos, desacuerdos y dificultad en el manejo de tareas. El agotamiento reduce la productividad, afecta la concentración y la memoria, y también puede afectar la salud mental y física.
Trabajo desde casa + Pandemia = Burnout
Ha pasado casi un año desde que todos cambiamos a una configuración de trabajo desde casa. Ha sido confuso, agotador y agotador. Como bien dice Esther Perel, terapeuta y autora “no es trabajo desde casa, es trabajo con casa”. Esta línea arroja luz sobre cómo nuestro trabajo y nuestro hogar se han entremezclado. Nos estamos despertando con montones de platos, apresurándonos a tomar la primera taza de té/café mientras nos registramos para la reunión de la mañana. Entre las reuniones estamos terminando nuestro desayuno, ocupándonos de las distracciones que pueden surgir como niños, padres o mascotas. En medio de todo esto, encontramos formas de hacer comida rápida para sobrevivir durante el día. ¡Sin olvidar las interminables tareas del hogar!
¿Te suena todo esto identificable?
Nuestras vidas han cambiado después de este montaje. Con frecuencia nos peleamos por la cantidad de trabajo que tiene cada uno de nosotros. Hay enfrentamientos constantes en el hogar entre parejas, padres e hijos. Los argumentos se centran en no tener espacio para trabajar, quién hace qué tareas en la casa (¡o ninguna!), quién cuida a los niños o las mascotas mientras el otro termina el trabajo u otras tareas, y hay desacuerdos sobre cuándo y cómo se deben hacer las cosas. .
El trabajo desde casa nos ha afectado a todos en gran medida. Ir a un espacio de trabajo permitía al profesional trabajador dedicar tiempo y atención solo al trabajo. Permitió a otros que se quedaron y cuidaron de la casa algo de espacio para terminar las responsabilidades relacionadas con la casa a su propio ritmo y sin molestias. La fusión de ambos ha creado una falta de esta distinción. Para colmo, todos estamos en medio de una pandemia que no parece terminar pronto. Esto nos restringe a nuestros hogares, sin posibilidad de descansos.
La segunda ola trae consigo más dolor y pena. Estamos agotados física y mentalmente. Con el duelo colectivo, la pérdida y la incertidumbre añadida, manejar las actividades cotidianas se ha convertido en una tarea. En resumen, todos estamos agotados hasta cierto punto.
Señales de agotamiento por trabajar desde casa
El trabajo desde casa ha provocado un aumento de la soledad, menor productividad, sensación de cansancio e inquietud. El agotamiento surge cuando el estrés no se ha manejado o ha durado más tiempo. La segunda ola de COVID-19 ha hecho que muchas personas pasen de un estado de estrés a un estado de cansancio. Comprender los signos del agotamiento laboral desde el hogar puede ayudarlo a manejarlo mejor.
Enfadarse y frustrarse con facilidad. Sentirse cansado y fatigado incluso cuando no ha hecho nada, provocando un esfuerzo físico. Tener menos paciencia que antes. Sentirse desesperado e impotente acerca de usted mismo, el trabajo o la vida. Cambios en los patrones de sueño y apetito. Permitirse estrategias de afrontamiento inútiles como beber, fumar o comer en exceso. Pérdida de interés en actividades o trabajos que antes disfrutaba. Sentirse abrumado y temiendo reuniones, llamadas de zoom o nuevos proyectos.
¿Encuentras estos síntomas relacionados? Hable con un terapeuta para una llamada de prueba.
Gestión del agotamiento del trabajo desde casa
El agotamiento comienza con un estrés prolongado. Usar formas más saludables de manejar el estrés puede prevenir el estado de agotamiento. El agotamiento del trabajo desde casa puede surgir no solo debido al estrés, sino también a la interacción continua de roles y responsabilidades. La pandemia ha mezclado nuestros roles y se convierte en un esfuerzo para manejar todos a la vez. Aquí hay algunas maneras en que puede manejar su agotamiento:
#1 Establecer límites
Los límites son líneas invisibles trazadas para bifurcar lo que es aceptable, lo que funciona y lo que no. Establezca límites en torno a sus horarios de trabajo, espacio de trabajo y responsabilidades. Comuníquese con su oficina sobre los horarios de su trabajo y evite entretener el trabajo más allá de su horario. En casa, comunica tu disponibilidad, horario de reuniones y tiempos de descanso. Esto permite que los demás entiendan cuándo tiene un trabajo ligero y cuándo necesita prestar toda su atención.
Los límites no son solo para los demás, sino también para uno mismo. Asegúrese de interrumpir sus horarios de trabajo y dedique ese tiempo para el hogar y para usted mismo.
#2 Revisa tus tareas
La FMH ha llevado a muchos a asumir responsabilidades adicionales debido a despidos, compañeros de trabajo enfermos, mayor carga de trabajo, etc. Es importante comunicar la cantidad de trabajo que puede realizar. Tener demasiadas tareas puede generar un estrés inmenso y puede provocar agotamiento.
#3 Socializa virtualmente
Sí, después de un largo día mirando la pantalla y con numerosas reuniones, puede resultar agotador conectarse con los demás. Pero es esencial conectarse con otras personas que no sean su compañero de trabajo o su familia. La socialización no tiene por qué ser solo videollamadas si eso es engorroso. Conéctese con otros a través de audio, texto o notas de voz. Programa una llamada semanal con tus amigos. Alternativamente, todos pueden reunirse para juegos rápidos en línea. Esto ayuda a desestresarse y construir conexiones.
Si echa de menos el ambiente de oficina de las charlas a la hora del chai, tenga días alternos/llamadas semanales no relacionadas con el trabajo con compañeros de trabajo durante su hora habitual del té.
#4 Pasatiempos
Dedica algo de tiempo a pensar en los dos años atrás y en los pasatiempos que querías tener pero no pudiste. Conecta esos pasatiempos en tu horario. Elija pasatiempos que sean una mezcla de fáciles y poco desafiantes. El objetivo no es dominar, sino utilizar estos pasatiempos para refrescar el cerebro, la mente y el cuerpo. Si no recuerdas ningún pasatiempo, ¡elige uno nuevo! Este es el mejor momento para ver pequeños proyectos de mejoras para el hogar. Asegúrate de hacerlo de forma segura.
#5 Autocuidado
Participar en alguna forma de autocuidado ha demostrado ser efectivo para lidiar con el agotamiento. Las actividades de autocuidado pueden ser sacar ‘tiempo para mí’, ser asertivo, decir no, escribir un diario, estar atento, dormir lo suficiente y una dieta nutritiva, etc. Cuidarse a sí mismo es vital ya que el agotamiento lo agota.
Al igual que pones a cargar tu computadora portátil después de que se agota la batería, tú también debes recargarte cuando experimentas agotamiento. Su cuerpo no es una máquina para estar en funcionamiento las 24 horas del día, los 7 días de la semana. Eres un ser humano con otras necesidades y deseos que van más allá del trabajo. Prioriza tus tareas diarias para gestionar el agotamiento de forma eficaz.
Preguntas frecuentes (FAQ)
R. Si no se controla, el agotamiento del trabajo desde casa puede causar cansancio y fatiga. Los primeros signos de agotamiento pueden ser cansancio físico, dolores y molestias constantes, etc. Es importante cuidar su salud física y mental durante el agotamiento.
R. La comunicación abierta con su gerente puede ayudar a establecer límites. Prepare una lista de tareas múltiples en su mano y cómo se le está volviendo difícil. Si una tarea no se puede descartar o compartir, busca una forma que te dé suficiente tiempo para completarla. Trabajar con un profesional de la salud mental puede ayudarlo a mejorar su comunicación.
R. No. Si aprende a manejar el estrés de manera saludable, puede prevenir el agotamiento y la fatiga. Es bueno hacer un seguimiento de su nivel de estrés y trabajar para reducirlo a través de mecanismos saludables.